Por su 20 aniversario, Air Nostrum nos regala
su amenaza de dejar de operar a Barcelona.
(Foto de Rafael Álvarez Cacho)
Como ya comentábamos en una de las pasadas entradas, Air
Nostrum no iba a dejar pasar la oportunidad de amenazar con dejar de operar en
toda Castilla y León una vez concluía la subvención que la Junta tuvo a bien
darles gracias a la cual el aeropuerto de Valladolid pasó de tener más de 3000
operaciones al año a las casi 600 con que ha terminado el 2014. Es decir una
reducción en la oferta de vuelos del 80% por la cual la aerolínea valenciana ha
recibido cerca de 11 millones de euros.
Y ha sido apenas quince días después de cumplido el plazo de
la subvención cuando han decidido soltar la bomba de que dejarían de operar en
Castilla y León a Barcelona desde comienzos de mayo, argumentando no hacerlo antes al querer así
proteger las reservas de semana santa, y obviando que se trata de un mes
electoral, lo cual da una nueva vuelta de tuerca a la silla turca en la que
dejan a las administraciones locales, provinciales y autonómicas.
Una vez dicho esto, también hay que resaltar que ni 24 horas
después, ya decían que hablarían con las administraciones para ver posibles
mecanismos de “promoción” o traducido al román paladino: a ver cuánto nos ofrecen los ayuntamientos y diputaciones,
ahora que la Junta no quiere hacer otro concurso, por operar 4 vuelos a la
semana y con unos horarios pésimos o inservibles para su principal mercado de
pasajeros, el ejecutivo.
Es decir, hoy anuncian que se van porque no hay subvención y
al día siguiente se muestran preocupados por ver de qué manera se pueden
preservar los vuelos con Barcelona (dinero mediante), mostrando de inmediato su
voluntad de establecer negociaciones con todo aquel dispuesto a regalarles unos
euros a cambio de un puñado de votos de sus habitantes con ideas más localistas.
Si bien puede parecer también un duro golpe para Valladolid,
lo cierto es que no es tal, pues si tomamos en consideración las cifras del año
pasado, en que Air Nostrum movió en sus 472 operaciones con Barcelona (recordar
que los vuelos veraniegos se mantienen) a unos 16.509 pasajeros, vemos que esto
equivale a unos 1375 pasajeros mensuales o unos 317 semanales.
Si tomamos por ejemplo las cifras de Vueling, que en 2014
opero 260 vuelos, esto supone una oferta de plazas del orden de los 46.500
asientos para una compañía que el año pasado transportó a 25.870 pasajeros, es
decir, aun tiene espacio para atender a cerca de 20.000 pasajeros más,
cubriendo sólo con esta compañía la demanda de los vuelos de Air Nostrum; si
bien también está Ryanair, que hará lo propio con otra parte de la demanda,
permitiendo que pese a la fuga de Air Nostrum en la ruta de Barcelona, aun
fuese posible crecer (y mucho) en pasajeros durante 2015 en esta ruta.
Así pues, si se va, Valladolid no debería notarlo
excesivamente; no obstante, todo hace pensar tras las últimas declaraciones de
la aerolínea que está encantada con las cifras de pasajeros en Castilla y León,
pero que si hay algún pardillo que pique y haga que los vuelos de Air Nostrum
sean aun más rentable, pues aun estarán más contentos operando en Castilla y
León.
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