La operación con aviones de menor tamaño
también ayudó a que la caida fuese aun mayor.
(Foto de Rafael Álvarez Cacho)
Durante el año 2014, se ha mantenido en términos generales
las fuertes tasas de descensos en el número de pasajeros un fuerte descenso de
pasajeros, hasta el punto de haberse producido crecimiento solo en uno de los
meses, lo cual ha supuesto que el aeropuerto se haya comportado exactamente a
la inversa que la media nacional. Cabe también resaltar que a lo largo de 2014,
se ha producido una pérdida de pasajeros media cada mes de poco más de 3.000 pasajeros.
Es decir, mientras en 2013 se contabilizaron 260.271 pasajeros, en 2014, el
aeropuerto ha reducido su número de pasajeros hasta contar con 223.587
pasajeros. Situando de este modo la media de pasajeros mensuales en 2013 en los
21689,25 por los 18632,25 que se registraron de media mensual en 2014 de 21689,25;
hasta dejar al aeropuerto con una caída anual del 14,09%.
Sin embargo, los números por si solos no pueden explicar el comportamiento de
los números de pasajeros transportados en el aeropuerto, ni la caída ha sido
pareja en todos los meses, por ello pasamos a continuación a tratar los números
mensuales para poder tener un mejor conocimiento de la situación real y sus
causas:
En enero y febrero, es donde se aprecian las caídas más elevadas de unos 7500 y 8200 pasajeros respectivamente, siendo la principal y única responsable clara la aerolínea Ryanair, que doce meses antes aun continuaba operando con Londres y Bruselas, mientras en 2014 ya no, lo cual prácticamente redujo a la mitad la oferta de asientos de un año a esta parte. Air Nostrum, pese a las reducciones de frecuencias en año previos consolidó vuelos en estos meses; y Vueling, también empezó a mostrar señales de consolidación de un mayor número de pasajeros.
En enero y febrero, es donde se aprecian las caídas más elevadas de unos 7500 y 8200 pasajeros respectivamente, siendo la principal y única responsable clara la aerolínea Ryanair, que doce meses antes aun continuaba operando con Londres y Bruselas, mientras en 2014 ya no, lo cual prácticamente redujo a la mitad la oferta de asientos de un año a esta parte. Air Nostrum, pese a las reducciones de frecuencias en año previos consolidó vuelos en estos meses; y Vueling, también empezó a mostrar señales de consolidación de un mayor número de pasajeros.
Ya en marzo y abril, el descenso se ve contenido, alcanzando una reducción que no supera las 5000 personas transportadas en la suma de ambos meses, siendo achacable este descenso a la restricción de la ruta con Lanzarote solo a los meses de verano, no operando pues hasta junio, así como los últimos coletazos de Londres y Bruselas que fueron suprimidas totalmente un año antes, entre tanto Air Nostrum continuó su consolidación aunque sin grandes números. Vueling por su parte cumplió el primer año de vida en el aeropuerto en el cual mantuvo su operativa reducida a 3 frecuencias semanales, incluso en la temporada de verano, lo cual le llevó a perder algunos pasajeros en estos meses aunque incrementase ocupaciones a cambio.
En el mes de mayo se observa un descenso más elevado, fruto de las circunstancias de los dos meses previos a los que hay que añadir el pronto final de los vuelos de Club de los 60, que normalmente suelen abarca todo el mes de mayo e incluso algún día de junio.
En junio el descenso está muy contenido en cuanto a
pasajeros se refiere, ya que aun no ha sido digerida la reducción de
ocupaciones de Vueling, pese a que esta incremente notablemente sus ocupaciones
mes tras mes, y la ruta con Lanzarote tampoco fue operada en este mes.
Durante julio y agosto, pese a recuperar la ruta con Lanzarote, las cifras no acaban de mejorar después de que un año antes hubiese varias frecuencias semanales con Ibiza gracias a Volotea que en este año pasado no se han repetido, y que suponen, añadida a la reducción de frecuencias de Vueling, que la suma de pasajeros perdidos en ambos meses supere los 3.500 pasajeros.
Durante julio y agosto, pese a recuperar la ruta con Lanzarote, las cifras no acaban de mejorar después de que un año antes hubiese varias frecuencias semanales con Ibiza gracias a Volotea que en este año pasado no se han repetido, y que suponen, añadida a la reducción de frecuencias de Vueling, que la suma de pasajeros perdidos en ambos meses supere los 3.500 pasajeros.
Septiembre destaca por si solo en 2014, por ser el único mes
en que se ha experimentado un aumento de pasajeros, fruto del mantenimiento de
frecuencias y rutas. Y pese al exiguo crecimiento de 68 pasajeros es motivo
para la esperanza pues muestra que la demanda de pasajeros sigue creciendo y
esto abre un gran panorama de crecimiento en Valladolid, de cara a cuando menos
recuperar los vuelos de años anteriores.
En octubre el descenso de pasajeros se vuelve a producir,
aunque con cifras más moderadas, tras la supresión en septiembre de la ruta con
Lanzarote, que en 2013 había llegado hasta finales de octubre.
Por último, en los meses de noviembre y diciembre se vuelve a acelerar el descenso,
debido a la decisión unilateral de Ryanair, y pese a cosechar ocupaciones
superiores al 80%, de reducir sus vuelos diarios a Barcelona, a tan solo 5
frecuencias semanales (diarios excepto martes y jueves).
Así pues, se observa un elevado descenso de pasajeros durante el último año, debido a la desaparición o reducción de frecuencias en rutas domésticas e internacionales, en especial de las ofertadas por Ryanair, pero sin olvidarse de las reducciones de vuelos comerciales por Air Nostrum, especialmente en lo referente a aquellos con destinos vacacionales, que se deben única y exclusivamente a la ausencia de subvención por parte de ningún organismo, y no a que la demanda se haya contraído un 56,39% en los últimos siete años.
Así pues, se observa un elevado descenso de pasajeros durante el último año, debido a la desaparición o reducción de frecuencias en rutas domésticas e internacionales, en especial de las ofertadas por Ryanair, pero sin olvidarse de las reducciones de vuelos comerciales por Air Nostrum, especialmente en lo referente a aquellos con destinos vacacionales, que se deben única y exclusivamente a la ausencia de subvención por parte de ningún organismo, y no a que la demanda se haya contraído un 56,39% en los últimos siete años.
Así pues, tras la desaparición de frecuencias y, aun a pesar de la recuperación
de varios vuelos chárter en todos los periodos del año, se espera para
Valladolid que el descenso se detenga en el año 2015 pudiendo quedar el
aeropuerto en cifras parecidas a las de este año pasado, pudiéndose experimentar
una variación del 1-2% en el transcurso de estos doce meses.
En cuanto a la gráfica, sólo decir que se observan como las cifras de pasajeros son paralelas prácticamente, lo que viene a refrendar que el problema no es otro que la falta de oferta de plazas, que impide cubrir toda la demanda presente, y que tan solo depende de que una aerolínea decida quedarse con todo el pastel para recuperar la senda ascendente. Destacar no obstante como se ha dejado notar una importante divergencia de pasajeros en enero y febrero de 2013 y 2014 a raíz de las supresiones de las rutas internacionales históricas del aeropuerto.
En cuanto a la gráfica, sólo decir que se observan como las cifras de pasajeros son paralelas prácticamente, lo que viene a refrendar que el problema no es otro que la falta de oferta de plazas, que impide cubrir toda la demanda presente, y que tan solo depende de que una aerolínea decida quedarse con todo el pastel para recuperar la senda ascendente. Destacar no obstante como se ha dejado notar una importante divergencia de pasajeros en enero y febrero de 2013 y 2014 a raíz de las supresiones de las rutas internacionales históricas del aeropuerto.
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