miércoles, 20 de agosto de 2008

Cuando El Pájaro Se Cansó


El transporte aéreo, es el medio de transporte, más seguro del mundo. Sin embargo, como en todo, de vez en cuando ocurren accidentes, y, por desgracia, hay que lamentar la muerte de pasajeros y tripulaciones.
En esta página, acostumbramos a hablar del aeropuerto vallisoletano, en exclusiva; sin embargo, no podemos hacer ejercicio de omisión y olvido, y, como muchos otros espacios, queremos, unirnos al desgraciado accidente y a los familiares y amigos de los fallecidos, así como de los heridos, en el acontecimiento en cuestión.
Sin animo de entrar, por una vez, en una fratricida guerra de cifras, nos limitaremos, a contar lo que ya se da por seguro, sin ahondar en los asuntos escabrosos o, de nulo interés para cualquier persona, afectada por el accidente. Trataremos esto, desde el punto de vista más humano, y, más cercano al dolor de las víctimas, que seamos capaces.
El vuelo en cuestión, el Spanair 5022 con destino Gran Canaria, impactó contra el suelo, tras causas que aun se desconocen, entorno a las 14:30 horas del día de hoy. De inmediato, todos los medios de emergencia se activaron, con el objetivo de salvar el mayor número de vidas posibles, y, darles el trato más necesario en el menor tiempo posible.
Hasta el accidente se movieron 2 helicópteros para extinguir el incendio, así como varios camiones de bomberos de AENA, a los que posteriormente se unirían, otros llegados de todas partes de la comunidad de Madrid.
No menos importante, fue el dispositivo humano de emergencias sanitarias, con cerca de 50 ambulancias , varias de ellas medicalizadas, y otros 2 helicópteros sanitarios, para atender a los heridos. Estas ambulancias, llegaron desde puntos tan distantes como Burgos, Guadalajara, Segovia o Ávila. también, trabajadores del SAMUR y del SUMMA, no dudaron en dejar su descanso, presentándose como voluntarios, para atender a la mayor cantidad de víctimas posibles.
Sin embargo, a pesar del importante contingente, y, de los ánimos de todos por atender a los pasajeros y tripulación en el menor tiempo posible y salvar a cuantas personas fuese posible, el tiempo, llevó a los peores presagios.
Lo que en un primer momento se calificó de accidente sin víctimas mortales, pasó de 0 víctimas, a, las más de 150 actuales, y, que dan buena cuenta del verdadero drama vivido. Como aspecto positivo, quedó, el haber salvado a varios niños, que en principio, no presentarán problemas para recuperarse, según fuentes sanitarias.
Sin embargo, desde aquí, nos parece más importante que este relato, más o menos profundo, unirnos al dolor de los familiares y amigos de las víctimas mortales, y, mostrarles todo nuestro apoyo, para que puedan afrontar, y, superen lo mejor posible, este duro trago que se les ha obligado a vivir. También, todo nuestro apoyo, para aquellos que, ahora, también velan por sus seres queridos en los diferentes hospitales de Madrid, esperando la más pronta recuperación de los heridos, y, que esta recuperación, sea, cuando menos, con el menor número de secuelas posible.
También nuestro apoyo a, los trabajadores de Spanair, que, también estarán pasando por un momento difícil; en especial, a los amigos y más directos compañeros, de la tripulación del vuelo en cuestión.
Como homenaje póstumo a los fallecidos de la tripulación, darles las gracias, por permitir, que, a pesar de lo aparatoso del accidente, no hubiese que lamentar más víctimas, gracias a su destreza en un momento de gran tensión.

Todo nuestro ánimo y apoyo a todos los afectados por este accidente.

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